sábado, 25 de julio de 2020

TO, XVII, A: Parábola del tesoro y la perla escondidos

“va sacando de su tesoro lo nuevo y lo antiguo”

“Tesoros a descubrir”
 
 La Perla, Rafael e ateliê. Museu do Prado, Madrid
XVII Domingo del tiempo ordinario
Año litúrgico 2019 - 2020 - (Ciclo A)


👉A doña Juana la llamaban ‘pirata’ porque usaba unas gafas negras que no lograban tapar el ojo blanco. Su hijo, Nicanor, escuchaba las bromas y aunque se quedaba callado, se le notaba incómodo. Un día, Nicanor desapareció, su madre lloraba desconsoladamente. Nicanor estaba cansado de las burlas. Pasados los años pudo llevar a su madre a vivir con él. El colegio donde Nicanor estudió, invitó a la promoción de estudiantes para celebrar 25 años, Nicanor fue el encargado de dar el discurso y empezó así: “queridos compañeros, soy Nicanor, un poco gordo y calvo, el hijo de doña Juana la ‘Pirata’ - El auditorio quedó en silencio- Quiero agradecer a Dios por darme una madre que decidió tener la apariencia de ‘pirata’ para darme la oportunidad de ver” - Doña Juana, elegantemente vestida se limpiaba las lágrimas con su pañuelo de seda- “Ustedes saben que mi madre es lo mejor que tengo, daría mi vida por ella, así como ella me la dio, la apariencia de ‘pirata’ la pude tener yo, pero me la evitó,…”

Si eres un tesoro agradecido, entonces, vales la pena. Si no eres agradecido, también vales la pena porque en el gran amor, no importa tanto ser amado, sino amar, no es tanto recibir, sino dar, alguna vez lograrás valorar y agradecer, aunque nunca sea tarde. 

👉El hospital estaba lleno de gente desesperada por el Covid19, los enfermos llegaban ahogándose, las puertas sonaban y se entreabrían. Entre ellos estaba don Mauro, cargado por sus dos hijos, con los ojos desorbitados, se abrieron paso entre la gente y lograron ingresar. Después de tres semanas, don Mauro se recupera y a veces se complica con sus cirrosis que lo acaban de descubrir. Ya vendieron su carro y están vendiendo su casa en Huánuco, su tierra natal, allí se casó con doña Flor, que ahora está conectada a un balón de oxígeno en su propia casa. Sus hijos están haciendo todo por salvarles la vida. Don mauro y su esposa Flor, vendía comida en la calle, durante 30 años, y han logrado que sus hijos tengan una carrera profesional y una casa donde vivir. Sus hijos, sacaron préstamos y posiblemente pierdan la casa donde viven, pero su desafío es salvar la vida a sus padres.

La vida es generosa, y cuando se convierte en un tesoro las cosas materiales terminan subvaloradas.

👉Laura es una vendedora de seguros, conoció a Luis en los talleres de capacitación. Después de un año, decidieron vivir juntos para criar a su hijo que pronto nacerá. La relación se ha convertido tóxica. Ella, ha decidido criar sola a su hijo. La cuarentena la estresó tanto que no se soportaba. Un día fue invitaba para hacer oración virtual en zoom. Laura, ha llorado tanto, y ha recibido el respaldo emocional de sus hermanos virtuales. Ha comenzado a invitar a sus contactos para agregarse a los momentos de oración. Algunos contactos han respondido y otros la ignoran. Laura es perseverante y sigue contando a sus amigos el poder de la oración. 

Cuando descubres que Dios transforma las vidas eres capaz de dejar aquellos momentos que tenían la preferencia en las jerarquías, en los momentos "más divertidos" a cambio de la paz y el amor de tu creador.

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Lectura del santo evangelio según san Mateo 13, 44-52

En aquel tiempo, dijo Jesús a la gente:«El reino de los cielos se parece a un tesoro escondido en el campo: el que lo encuentra, lo vuelve a esconder y, lleno de alegría, va a vender todo lo que tiene y compra el campo. El reino de los cielos se parece también a un comerciante de perlas finas, que al encontrar una de gran valor se va a vender todo lo que tiene y la compra. 
El reino de los cielos se parece también a la red que echan en el mar y recoge toda clase de peces: cuando está llena, la arrastran a la orilla, se sientan y reúnen los buenos en cestos y los malos los tiran.
Lo mismo sucederá al final de los tiempos: saldrán los ángeles, separarán a los malos de los buenos y los echarán al horno de fuego. Allí será el llanto y el rechinar de dientes.
¿Habéis entendido todo esto?».
Ellos le responden: «Sí». Él les dijo: «Pues bien, un escriba que se ha hecho discípulo del reino de los cielos es como un padre de familia que va sacando de su tesoro lo nuevo y lo antiguo».


Explicación de la pintura

Sagrada Familia, llamada la Perla

Hacia 1518. Óleo sobre tabla, 147,4 x 116 cm. Sala 049
La Sagrada Familia, llamada "La Perla" representa a la Virgen María, el Niño, san Juanito y santa Ana. El Niño se sienta entre las rodillas de su madre, a quien mira sonriendo de medio perfil, y apoya el pie izquierdo sobre una cuna de mimbre. San Juanito se coloca de pie frente al Niño y le ofrece unas frutas dentro de su pelliza, mientras la Virgen contempla la escena con expresión dulce. Santa Ana, arrodillada detrás del Niño, mantiene una actitud de meditación, con los ojos cerrados, arropada por el abrazo de su hija. Al fondo, en el lado derecho, se abre un paisaje con edificios en ruinas, un puente sobre un río y pequeñas figuras, mientras que a la izquierda, tras el vano de una ventana, aparece san José. En primer plano, vegetación, piedras y una concha marina.

The Holy Family, or 'The Pearl'

Ca. 1518. Oil on panel. Room 049
Philip IV called this painting The Pearl, as it was his favorite among all those in his collection. The composition was designed by Raphael but part of the execution was delegated to his pupil Giulio Romano (c. 1499-1546). As in other late works by Raphael, we find considerable emphasis on the landscape and contrasts of light, the result of the artist´s re-encounter with the work of Leonardo in Rome between 1513 and 1516. That influence is also evident in the pyramidal arrangement of the figures. The work was painted for Ludovico Canossa, and successively passed through the collections of the Duke and Duchess of MantuaCharles I of England and Luis de Haro, who gave it to Philip IV.

sábado, 18 de julio de 2020

TO XVI, A: “¿No sembraste buena semilla en tu campo?”

Trigo vs Cizaña

Un proceso inevitable
XVI Domingo del tiempo ordinario
Año litúrgico 2019 - 2020 - (Ciclo A)
 

Paisaje con la parábola de los Cizaña entre el trigo – (Abraham Bloemaert) Wikioo.org

_ “A los corruptos de mi país les deben aplicar la pena de muerte y listo”
_ “Sí, muerto el perro, muerta la rabia”

_ “Por qué no acabamos ya con los desobedientes que no respetan la cuarentena”
_ “Es que son ignorantes, soberbios, creen que el virus no les llegará,…”

_ “No entiendo por qué mis hermanos no me comprenden”
_ “Ignóralos y solucionado el problema”

_ “Eso no lo voy a perdonar, me vengaré para que sepas lo que se siente”
_ “Todo lo malo se paga”

¿Te suenan familiares estos diálogos? Como tú, yo también estoy renegando de la pandemia, Covid19. Tenía proyectos a realizar en el 2020. Por lo cual, será ‘inolvidable’ me obligo a replantear aquellos proyectos que los consideraba maravillosos.

En este sentido, aprovechando la cuarentena, varios hemos reformulado los proyectos, y hemos formado equipos virtuales. 

En las organizaciones, existen, sin duda, los que plantean proyectos buenos. Quienes no dicen palabras, pero en el fondo son opositores al proyecto. Y los que están ilusionados con el proyecto y quieren acabar con cualquier resquicio de oposición.

Entonces, implementas el proyecto, organizas los equipos. Y de pronto, aparecen los ‘relajados’, los que ven problemas y debilidades por todas partes, nunca en sí mismos y menos con ganas de mojarse las manos para solucionarlos. Y ojo: “el optimista tiene siempre un proyecto; el pesimista, una excusa” (Anónimo).

Y así aparecen posibles “soluciones” radicales: desechamos el proyecto, cambiar el equipo humano, el pesimismo, … Si lo desechas o cambias de equipo humano, faltas el respeto a las personas comprometidas, pierdes los talentos. Seleccionar el trigo es un proceso para perseverantes, pacientes y humildes de corazón.

En realidad, ahora, las grandes propuestas organizacionales, prefieren iniciar con una ‘análisis’ interno, con esa búsqueda de comprender quiénes somos, qué queremos, qué buscamos. Es decir, se necesita, entender estos procesos. Los grandes ideales, las grandes metas son posibles para los pacientes y sencillos.

Yo, ¿quién soy? ¿permito crecer? ¿ahogo lo que germina? ¿Son necesarias las semillas pequeñas de la confianza, esperanza y misericordia? Si Dios sembró la buena semilla en tu corazón no lo desequilibres con la venganza, el resentimiento, la desesperación.

¿No sembró el Señor buena semilla en ti? Con su ayuda puedes hacerla crecer. Cuidado, siempre llega quien quiera sembrar la mala semilla. 

¿El covid19 está en el proyecto de Dios?

Lectura del santo evangelio según san Mateo 13, 24-30

En aquel tiempo, Jesús propuso otra parábola a la gente diciendo:
«El reino de los cielos se parece a un hombre que sembró buena semilla en su campo; pero, mientras los hombres dormían, un enemigo fue y sembró cizaña en medio del trigo y se marchó. Cuando empezaba a verdear y se formaba la espiga apareció también la cizaña. Entonces fueron los criados a decirle al amo:
“Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde sale la cizaña?”.
Él les dijo:
“Un enemigo lo ha hecho”.
Los criados le preguntan:
“¿Quieres que vayamos a arrancarla?”.
Pero él les respondió:
“No, que al recoger la cizaña podéis arrancar también el trigo. Dejadlos crecer juntos hasta la siega y cuando llegue la siega diré a los segadores: arrancad primero la cizaña y atadla en gavillas para quemarla, y el trigo almacenadlo en mi granero”».

 Para Profundizar:






sábado, 11 de julio de 2020

TO XV, A: Salió el Sembrador a sembrar.

La semilla de papá

Parábola del sembrado. GRIMMER, ABEL.Copyright de la imagen ©Museo Nacional del Prado



Hijo: “papá para qué guardas esas papas pequeñitas”
Papá: “para convertirlas en semilla”
Hijo: “entonces guarda las papas más grandes”
Papá: “a las semillas pequeñas les crece más rápido la raíz y se hacen fuertes”.
Hijo: “Y por qué las seleccionas.”
Papá: “porque estas semillas han sido mas fuertes y fértiles en los últimos años.

XV Domingo del tiempo ordinario
Año litúrgico 2019 - 2020 - (Ciclo A)

Tú eres el fruto de la semilla de tus padres. Cada ser vivo es un fruto que se convierte en semilla de vida abundante. Ese ciclo es maravilloso: se conocen tus padres, se enamoran, te conciben, te cuidan, cambian tus pañales, te nutren, te vacunan, te enseñan a leer y escribir, te va enrumbando en la vida.
Hasta que eres lo que eres con la capacidad de enfrentar los problemas de la vida. Los esfuerzos, ensayos y errores de tus padres han cimentado tu vida y tú deberás fortalecerla. Recuerda, si hubiesen existido otros factores, no estarías leyendo esta reflexión. Ahora te toca ser semilla, en el sentido amplio: genético, intelectual, espiritual y emocional.

Vigilancia: y de pronto, resulta que te entusiasma la vida, Dios te emociona y te impacta. Pero te duermes, te descuidas, y hay muchas voces sonando en tus oídos: “Dios es un invento”, “la vida espiritual es para acomplejados”, “no estudies”, “posterga todo”,… Dios y la vida se relativizaron. ¡Entiéndelo!

Miedo: y escuchas a tus padres, a la gente que te quiere, a Dios, … pero llegas al trabajo y escuchas voces: “llegó el mojigato”, “este grupo no es de santurrones”, “vives en la Edad Media”, “que te salve tu Dios”, … Y te doblegas, te avergüenzas y finges pensar como ellos, y también finges la profundidad de la vida espiritual, la semilla de Dios. ¡sucumbiste!

Ilusión: y escuchas las palabras que te hacen sentir vivo, importante, con una misión clara. Tu vida parece llena de los milagros de Dios. Pero te desespera no poder ir a consumir a los supermercados y presumir de las marcas de ropa. No poder participar de todas las reuniones y fiestas de compañeros de trabajo. No contar aquellas historias, tan cómicas y populares. "A tanta insistencia poca resistencia"

Fruto abundante: se debe a la semilla y a su buen cultivo. Es importante preparar la tierra, nutrirla, sacarle la maleza, regarla a su debido tiempo, dirigir el riego y evitar las plagas. El miedo se reemplaza por esperanza, la sabiduría del sembrador mide los tiempos y reza para que los fenómenos naturales no descontrolen su siembra. Y así, la cosecha es abundante, además comparte a los vecinos y guarda las mejores semillas.

En conclusión, aunque estés es al borde, entre las piedras, sufriendo crisis, enano por las malezas, quizá seas la tierra que todavía no se ha cultivado, como fuere, la palabra sembrada con una generosidad que superar la sabiduría del sembrador, se ha propuesto crecer, no la dejes morir. La semilla de papá Dios dará su fruto. 

Salmo: 64

Tú cuidas de la tierra, la riegas
y la enriqueces sin medida;
la acequia de Dios va llena de agua,
preparas los trigales. R/.

Así preparas la tierra.
Riegas los surcos,
igualas los terrones,
tu llovizna los deja mullidos,
bendices sus brotes. R/.

Coronas el año con tus bienes,
tus carriles rezuman abundancia;
rezuman los pastos del páramo,
y las colinas se orlan de alegría. R/.

Las praderas se cubren de rebaños,
y los valles se visten de mieses,
que aclaman y cantan. R/.



Lectura del santo evangelio según san Mateo 13, 1-23
Aquel día, salió Jesús de casa y se sentó junto al mar. Y acudió a él tanta gente que tuvo que subirse a una barca; se sentó y toda la gente se quedó de pie en la orilla. Les habló muchas cosas en parábolas:
«Salió el sembrador a sembrar. Al sembrar, una parte cayó al borde del camino; vinieron los pájaros y se la comieron. Otra parte cayó en terreno pedregoso, donde apenas tenía tierra, y como la tierra no era profunda brotó enseguida; pero en cuanto salió el sol, se abrasó y por falta de raíz se secó. Otra cayó entre abrojos, que crecieron y la ahogaron. Otra cayó en tierra buena y dio fruto: una, ciento; otra, sesenta; otra, treinta.
El que tenga oídos, que oiga».
Se le acercaron los discípulos y le preguntaron:
«Por qué les hablas en parábolas?».
Él les contestó:
«A vosotros se os han dado a conocer los secretos del reino de los cielos y a ellos no.
Porque al que tiene se le dará y tendrá de sobra, y al que no tiene, se le quitará hasta lo que tiene. Por eso les hablo en parábolas, porque miran sin ver y escuchan sin oír ni entender. Así se cumple en ellos la profecía de Isaías:
“Oiréis con los oídos sin entender; miraréis con los ojos sin ver;
porque está embotado el corazón de este pueblo, son duros de oído, han cerrado los ojos;
para no ver con los ojos, ni oír con los oídos, ni entender con el corazón,
ni convertirse para que yo los cure”.
Pero bienaventurados vuestros ojos porque ven y vuestros oídos porque oyen. En verdad os digo que muchos profetas y justos desearon ver lo que veis y no lo vieron, y oír lo que oís y no lo oyeron.
Vosotros, pues, oíd lo que significa la parábola del sembrador:
si uno escucha la palabra del reino sin entenderla, viene el Maligno y roba lo sembrado en su corazón. Esto significa lo sembrado al borde del camino.
Lo sembrado en terreno pedregoso significa el que escucha la palabra y la acepta enseguida con alegría; pero no tiene raíces, es inconstante, y en cuanto viene una dificultad o persecución por la palabra, enseguida sucumbe.
Lo sembrado entre abrojos significa el que escucha la palabra; pero los afanes de la vida y la seducción de las riquezas ahogan la palabra y se queda estéril.
Lo sembrado en tierra buena significa el que escucha la palabra y la entiende; ese da fruto y produce ciento o sesenta o treinta por uno».

Pintura


GRIMMER, ABEL

Amberes, 1579 - Amberes, 1618. Hijo del pintor Jacob Grimmer. Aparece citado por Giorgio Vasari y por Karel van Mander. Especialista en paisaje, entró como maestro en la Guilda de San Lucas.


sábado, 4 de julio de 2020

TO, XIV, A: “Te alabo Padre, Señor del cielo y de la tierra”

Domingo XIV del tiempo Ordinario – Ciclo A (Mateo 11, 25-30)  

¿Debemos ser Sencillos?
Cristo llevado y presentado ante el Procurador Poncio Pilato. Óleo de Mihály Munkácsy (1881). Déri Museum, Debrecen.
 😎En la pintura, Jesús, ante Poncio Pilato. Polemizando con los poderosos de su tiempo, y la presencia de muchos pobres. ¿Jesús es El Salvador o una amenaza?

- 😁Don Ramón: “¿Tú también reprobaste?
- Chilindrina: “pero también reprobó el Chavo”
- Chavo: “pero yo porque soy pobre”
- Chilindrina: “Y eso, ¿qué tiene que ver?”
- Chavo: “que nunca desayuno y entonces llego a la escuela con mucha hambre y por estar pensando en la comida no puedo pensar en la geografía”
- Don Ramón: “óyeme, óyeme, eso no tiene que ver absolutamente nada. Don Benito Juárez también fue muy pobre y cuando tenía tu edad era el primero de su clase”.
- 😀Chavo: “y cuando tenía su edad ya era presidente”😄


El Chavo es un personaje capaz de decir las verdades amargas. La Chilindrina, mira en el ‘niño del barril’ una escusa de sus errores. Don Ramón tiene talento, pero no le gusta trabajar. Aunque los personajes tienen sus momentos felices no dejan de plantear preguntas importantes a la sociedad. 
Las preguntas pueden ser como un virus sin antídoto, los sabios de este mundo ya las han resuelto y también saben cómo agudizarlas: las desigualdades sociales, la calidad de la educación, la vivienda, la salud, etc.

En este contexto, estas preguntas están siendo analizadas por los países, de acuerdo a su poder económico y científico. Algunos países, como Italia, China, y otros, están instalando observatorios científicos para evitar o prevenir las pandemias. Otros, están mirando cómo salir de la crisis económica, y Latinoamérica, cómo enterrar a sus muertos.

La pobreza es un factor destructivo a lo largo de la historia. Y la riqueza soluciona muchos sufrimientos físicos. Entonces, el Chavo, aunque pobre, debería estudiar más. Y don Ramón, replantearse la vida, el ejemplo, la sensibilidad humana, la vida espiritual,… La sabiduría de Dios no se compra, no es exclusiva de los pobres o de los ricos.

Lo triste es que los ricos consideren a los pobres como ignorantes, apestosos, fracasados, ‘pecadores’, como la “chusma”. Y lo más triste es cuando entre pobres nos despreciamos, nos estafamos. La sabiduría de Dios se revela en la fraternidad, igualdad.

Jesús acompaña a los que sufren no sólo el desprecio, sino también la pobreza. Jesús se revela a los que quizá no le creen, pero le respetan. Jesús, les ha pillado a los poderosos que se molestan cuando los pobres comienzan a defender sus derechos, a no idolatrarlos, a exigirles trabajo con solidaridad, inversión con humanidad, servicio con bien común.

Si el Dios de Jesús es tan humano, tan cercano, cómo no reposar nuestra cabeza en su corazón ahora que estamos cansados y agobiados. Si la ciencia nos resolverá algunos problemas por qué no darnos la oportunidad de pensar en cómo recomenzar, cómo vivir después de la pandemia.

Nuestro reto es ser sencillos. “Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has mostrado a los sencillos las cosas que escondiste de los sabios y entendidos. Sí, Padre, porque así lo has querido”.


Lectura del santo evangelio según san Mateo 11, 25-30

EN aquel tiempo, tomó la palabra Jesús y dijo:
«Te doy gracias, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos, y se las has revelado a los pequeños. Sí, Padre, así te ha parecido bien.
Todo me ha sido entregado por mi Padre, y nadie conoce al Hijo más que el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar.
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré. Tomad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontraréis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera».

Algunas páginas para la reflexión exegética: