Esperanza en nuestra selva
Domingo XXXIII del tiempo ordinario – Ciclo B (Marcos 13, 24-32) – 18 de noviembre de 2018
Henri Matisse, 1869-1974. the forest at fontainebleau. (National Gallery-Londres) |
“No hay mal que dure 100 años ni cuerpo que lo soporte”
Esta es la esperanza escatológica. Es decir, siempre llega la limpieza y la salud. El mal no supera al bien. se puede aplicar a “Toda potencia cae por lo más pequeño” . La maravilla es que “en este reino salvaje conviven los animales, tienen crisis de personalidad y son cegados por el delirio de poder. Esta es la historia de la deforestación de nuestra selva.
Y así, podemos comenzar la historia de un lobo. Este lobo parecía un mago, manejaba moto, encantaba serpientes, era protegido en su madriguera por los lobos convertidos en fieles canes. El lobo, hizo magia económica, los animales atónitos tenían que formar largas colas para alcanzar la leche y el pan de cada día. Todo el mundo sabe que es lobo, pero sus palabras son de un perrito amaestrado.
No sólo era la crisis económica del mago lobo, sino también el terror sembrado por el gorila, éste que quería ser león. La situación se puso insostenible, muchos migraron a otras selvas. Y así, el lobo posibilitó a un hámster que se encargue de la selva.
La historia cuenta que el hámster tenía un gran amigo, el gato montés. El hámster no estaba sólo en la nueva ingeniería, gozaba de gran aceptación en esta selva. La selva necesitaba estar en paz y pedía la captura del gorila. Pronto, el hámster no dudo en usar de las cigarras, las águilas, los loros, las urracas y todo tipo de animales que comunicaran sus éxitos.
El gorila estaba también protegido, bajo los Sauces, por una linda garza, y así se mantenía operativo en la selva. Aunque se cuidaban; la ardilla, la gaviota y mas de 80 animales buscaban sigilosamente al gorila y lograron capturarlo.
El hámster y el gato montes también querían capturar al gorila, quizá negociar. Nunca se sabe con estos animales. Mientras la ardilla y la gaviota perseguían al gorila, el hámster estaba disfrutando de la pecera en la selva y el gato montés se entero por el grito de los pelícanos que el gorila había sido capturado. El gato montés y el hámster no se alegraron, se molestaron, tanto que maltrataron a los animales protagonistas de tremenda captura.
Aparentemente, ya no se formaban colas, pero el hambre seguía. Se apoderaba, el miedo a los cómplices del gorila y también al escuadrón de gallinazos del hamster y su amigo.
Nadie se explicaba por qué pagar la rabia del hámster y del gato montés. El hámster, andaba acompañado de sus hámsters bebes. Estos, iban creciendo tan rápido como sus ansias de poder, alimentados y protegidos por el gato montés, en la selva, eran como Mickey mouse, encantadores.
El lobo estaba en su maison, aquella selva, de la cual regresó recitando un poema y encantando a los animales más jóvenes y con pocos recuerdos. El hámster adulto estaba en la alcantarilla, sin poder salir, no dejaba de roer y convenció a sus hamsters bebes que serán los encargados de un nuevo imperio. Después de todo, la selva producía, hojas verdes, metales preciosos, business, etc.
Los lobos disfrazados de fieles canes, el hámster y otros apoyaron al lobo para que regrese. Y así se configura la corte de mascotas: cigarras, zorros, conejos, cuervos, gallinazos, urracas, etc. Unas mascotas encargadas de la ley, de la vigilancia. Es decir, la selva estaba estratégicamente dominada.
Aunque, después vino la vicuña y también el perro, ambos cholos, la selva ya estaba organizada. Al final, cada uno a su estilo, deforestaba la selva.
El cuento sigue, los hámster seguían el imperio y estaban a punto de convertirse en sus emperadores, pero como cada uno tiene el delirio de poder, entonces, ella se impuso. La llevaba fácil. Su inteligencia fue cegada por su delirio de poder. Tenaz. Ambiciosa. Dominante.
Claude Monet. Gallery National. London. |
Pero parece que el odio es una epidemia en su vida, al igual que el hámster anciano, sentía que le habían robado la corona y el ropaje para gobernar la selva. Primero fue un perro cachaco. Luego, pasó lo insospechado, un roedor superaba a otro roedor. No soportó que un cuy le ganara.
Entonces, activó a su corte de mascotas, cuervos, conejos, cigarras, lechuzas, etc. Y no le dejó dominar al cuy. Pero el cuy estaba acompañado por una jirafa y una osita.
El cuy fue puesto como auténtica rata, no aceptó ser rata y renunció. Entonces, llegó la jirafa a gobernar esta selva.
La emperatriz se reunió con la jirafa, tenía orejas grandes y el cuello necesario para decir: ¡sí! o ¡no! La hámster quería hacerle parte de esta corte de mascotas, pero la jirafa prefirió mantener la cabeza en lo alto y no aceptó.
La selva estaba muy cansada. La deforestación continúa y sus árboles seguían esperando, los ríos y las casuchas no soportaban más tempestades.
Entonces, la jirafa se empoderó, usó estrategias del clamor popular para arrinconar a las mascotas. Renovó la corte, varias mascotas escaparon y otras se escondieron.
Ahora, la jirafa, está del lado de los animales de la selva, todos decidirán que los gorgojos no sigan en la mazorca. Los hámster están camino a la alcantarilla. La vicuña está lejos. El perro está que soporta como buen cachaco. Y el lobo, ya no baila el “teteo”, este lobo tenía ínfulas de león, rugía y muchos temblaban, la corte obedecía; pero hay águilas con mirada fina, loros en una selva virtual, en la cual el lobo está perdido. El lobo no ruge, maúlla.
El lobo se siente intocable, pero las mascotas que le protegían van desapareciendo; siente terror a la alcantarilla. En realidad, no quería a los animales de la selva, les trataba como de "segunda clase" y por último, trató a algunos como “imbéciles”. Si les robó años de futuro a la selva, la vendió, hizo de ella lo que quizo, qué esperar?
Así es la selva, nunca te aburres. Un lobo que se alucina león, lobos con alucinaciones de fieles canes, unas ratas que se creen Mickie Mouse o hámsters, un gato en su monte digital. Todos sufren de lo mismo y se dejan atrapar por una hormiga o por una águila, en fin, por aquellos laboriosos animales que quieren lo mejor para la selva.
Estos son signos de esta historia, de nuestra selva, y seguirá. Estate atento y mira qué animal eres. No pierdas la esperanza, la deforestación no debe seguir, las mentes corruptas no deben gobernar, los delirios de poder matan el futuro de la selva.
Esta historia, va por mas de 30 años, sólo cabe en las mentes retorcidas. No a la deforestación! No a la corrupción!
No se aBurra en esta selva!!!
Género apocalíptico:
Se conoce como género apocalíptico a un conjunto de expresiones literarias surgidas en la cultura hebrea y cristiana durante el período helénico y romano (siglos II y I aC y siglos I hasta mediados del siglo II) y que expresan, por medio de símbolos y complejas metáforas, la situación de sufrimiento del pueblo judío o de los seguidores de Cristo y su esperanza en una intervención mesiánica salvadora o en el caso de la apocalíptica cristiana en la Parusía o segunda venida de Cristo.
Evangelio del día
Lectura del santo Evangelio según San Marcos 13, 24-32
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«En aquellos días, después de esa gran angustia, el sol se hará tinieblas, la luna no dará su resplandor, las estrellas caerán del cielo, los astros se tambalearán.
Entonces verán venir al Hijo del hombre sobre las nubes con gran poder y majestad; enviará a los ángeles para reunir a sus elegidos de los cuatro vientos, de horizonte a horizonte.
Aprended de esta parábola de la higuera: Cuando las ramas se ponen tiernas y brotan las yemas,deducís que el verano está cerca; pues cuando veáis vosotros suceder esto, sabed que él está cerca,a la puerta. Os aseguro que no pasará esta generación antes que todo se cumpla. El cielo y la tierra pasarán, mis palabras no pasarán, aunque el día y la hora nadie lo sabe, ni los ángeles del cielo ni el Hijo, sólo el Padre.»