«Todo lo ha hecho bien: hace oír a los sordos y hablar a los mudos»
Jesús viene por los “impuros” y profundiza en la escucha y el habla. Restaurar esta comunicación significará romper con la idea tradicional de que el mundo pagano no es digno de Dios.
XXIII Domingo del tiempo ordinario
Año litúrgico 2023 - 2024 - (Ciclo B)
Jesús dice “Effetá” para entrar en el fondo de las miserias de los paganos y restaurar nuestra humanidad con sed de eternidad.
Marcos es el evangelio que nos presenta a Jesús en las fronteras, allí donde Dios parece no ser relevante, en los corazones que sienten a Dios lejano pero no han vuelto los ojos a las raíces de comunión con su creador.
¿Qué significa Effetà?
Restaurar. Evoca la creación del hombre, Génesis, Jesús se inclina sobre el sordomudo como Dios se inclinó sobre Adán, Le toma la cabeza entre las manos, signo de bendición, y le marca con su saliva, es decir, con el sello de su humanidad, él que es la Sabiduría de Dios. Le toca la oreja, como si le confiara el gran secreto del amor de Dios por él y, al igual que Dios hizo con Adán, Jesús devuelve a este hombre al mundo de los vivos respirando sobre él.
Effetà – Restaurar los oídos y la lengua
El mundo necesita restaurar la capacidad para escuchar y para anunciar la restauración de la comunión con Dios y con el hombre.
Restaurar la fraternidad, necesaria cada día para tener un hermano, no un enemigo. Pero, este acto que debería ser natural necesita de algunos procesos, de abandonar las actitudes corrosivas, de las ganas de ser creaturas nuevas en las manos de Jesús.
Effetà – Romper prejuicios y fronteras
Jesús camina en las regiones marginales. En aquellas fronteras mete su dedo y sopla sobre lo profundo del hombre para restaurarlo. ¿Restaurar nuestro sello divino con el halito de Dios, con la sabiduría de su Hijo? Vamos opacando la huella de nuestro creador con nuestros gestos cargados de malas intenciones.
Entre las fronteras que hacen sufrir a la humanidad podemos identificar:
- Los países en guerra: Palestina, Israel, Ucrania, Myanmar, en Kivu del Norte.
- El fenómeno de la migración. “que los mares y los desiertos no sea cementerios” (Papa Francisco. La justicia, la fraternidad y solidaridad parecen no ser consideradas en las leyes de fronteras. Lo terrible es cuando algunos de los cristianos mismos tienen juicios xenófobos, racistas, “es un pecado grave”.
- La corrupción como falta de humanidad en los países como Nicaragua, Perú, Venezuela, Haití, etc.
- La contaminación. El viaje a Asia y Oceanía del Papa Francisco (setiembre 2024) nos lleva a retomar la Laudato Si, el cuidado de los archipiélagos y las culturas.
- La intolerancia religiosa y los obstáculos de la fraternidad. La iglesia llamada a romper las barreras que clasifican. La primera cita del papa Francisco en Indonesia fue con los huérfanos y refugiados. Además, un documento que no deberá pasar desapercibido, la «Declaración conjunta de Istiqlal 2024» -Promover la armonía religiosa por el bien de la humanidad- firmada el jueves 5 de septiembre por el papa Francisco y el gran imán Nasaruddin Umar durante el encuentro interreligioso en la mezquita de Istiqlal de la capital indonesia.
Efettá – hablar como el sordomudo
Nuestra cultura nos aleja cada día de nuestro mejor juez, la conciencia. La autoevaluación parece ya una sesión para el psiquiatra. Era y debe ser natural analizar mi vida. ¿Escucho a las personas, mis relaciones son sanadoras, quiero renovar mi vida, rompo las barreras de los prejuicios?
Hablar como el sordomudo sanado. Esta experiencia es la más difícil, nos quedamos en lo impactante y el mensaje es el desenlace. Precisamente, es de la que necesita nuestra vida y nuestra familia. Saber hablar de la experiencia, de la restauración que Dios ha hecho de mi existencia. Este testimonio de soltar la lengua para edificar, para dar gracias a Dios, para ser imparables en la comunicación de su Palabra, consecuentes de ser bautizados. ¿Por qué algunas palabras van cargadas de heridas, frustraciones, prejuicios, resentimiento? Al final ¿Qué construyen y para qué son útiles las palabras que uso contra los demás?
Palabra del Papa Francisco
Pienso también en las personas marginadas y heridas, tanto moral como físicamente, a causa de los prejuicios y las supersticiones, en ocasiones, hasta el punto de arriesgar la propia vida, como nos lo recordaban James y sor Lorena. La Iglesia quiere estar particularmente cercana a estos hermanos y hermanas, porque en ellos, Jesús está presente de un modo especial (cf. Mt 25,31-40), y donde está Él —nuestra cabeza— allí estamos también nosotros, que pertenecemos al mismo cuerpo, «[el cual] recibe unidad y cohesión, gracias a los ligamentos que lo vivifican y a la acción armoniosa de todos los miembros» (Ef 4,16)”
(El Papa en el Santuario de María Auxiliadora de Port Moresby)
Lectura del santo Evangelio según san Marcos 7, 31-37
En aquel tiempo, dejando Jesús el territorio de Tiro, pasó por Sidón, camino del mar de Galilea, atravesando la Decápolis. Y le presentaron un sordo, que, además, apenas podía hablar; y le piden que le imponga la mano.
Él, apartándolo de la gente, a solas, le metió los dedos en los oídos y con la saliva le tocó la lengua.
Y mirando al cielo, suspiró y le dijo:
«Effetá» (esto es, «ábrete»).
Y al momento se le abrieron los oídos, se le soltó la traba de la lengua y hablaba correctamente.
Él les mandó que no lo dijeran a nadie; pero, cuanto más se lo mandaba, con más insistencia lo proclamaban ellos.
Y en el colmo del asombro decían:
«Todo lo ha hecho bien: hace oír a los sordos y hablar a los mudos».