Homilía y Reflexión

Homilía para "Reflexionar la vida terrena a la luz de la Sagrada Escritura"

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“Este hombre empezó a construir y no pudo acabar”

Se empieza voluntariamente, pero sin la motivación divina no se puede avanzar. Antes de iniciar, es necesario tener claro un objetivo y una meta: por dónde, cómo, cuándo y con quién caminar. En esa jerarquía, todo comienza con Jesús mismo. Hoy, Pier Giorgio Frassati será proclamado Santo por el Papa León XIV, un joven que nos motiva a ser mejores personas.

"De ti mismo no harás nada, pero si tienes a Dios como centro de todas tus acciones, entonces alcanzarás al meta" (Pier Giorgio Frassati)


Michelangelo - Creation of Adam (cropped)

XXIII Domingo del Tiempo Ordinario
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La cruz del discípulo

Todos somos discípulos, sin duda, aunque con muchas postergaciones. No se trata de abrir controversias sobre el discipulado, pero en esta línea del Evangelio de Lucas, el verdadero discípulo tiene a Jesús a la cabeza de todas sus preferencias.

La importancia del padre, de la madre o de la familia debe ser, en cierto sentido, pospuesta. El mismo Jesús, en su vida terrena, no apartó a su madre, que lo acompañó fielmente con el corazón traspasado; junto a su Hijo y a los discípulos, también nos acompaña a nosotros. Ella es imagen de la verdadera discípula: con la cruz a cuestas, al lado de Jesús. Su ejemplo nos abre a la magnitud interior de la fe, al peso de la cruz y a la fuerza necesaria para cargarla, sostenidos por el amor a la justicia, a la paz y a la vida.

La cruz del discípulo puede expresarse en continuas renuncias: el servicio a los demás, el cuidado de los Cristos sufrientes, el estudio de la Palabra, el tiempo para la formación espiritual, la perseverancia en la oración y el deseo de profundizar en la fe y en la vida cristiana.

"Mamá, hay un pobre que tiene hambre, y papá no le ha dado de comer, quizá Jesús nos lo ha enviado" (Pier Giorgio Frassati)

Procrastinación espiritual

La vida espiritual puede ser escasa, aparente o dispersa. No es un momento romántico ni fantasioso, lleno de velas y aromas. La espiritualidad verdadera exige disciplina, voluntad y constancia. No siempre se recorre entre dulzuras; muchas veces está marcada por la sequedad, la ansiedad y el cansancio. Esa sensación de estancamiento y frustración solo puede sostenerse con los dones de Dios: sabiduría, paciencia, perseverancia, esperanza y fe.

"Prefiero llevar yo mismo los paquetes a los pobres, pues así puedo infundirles ánimos y darles esperanzas" (Pier Giorgio Frassati)

Terminar lo iniciado

Si quieres construir una torre, calcula antes los gastos; así evitarás que otros se burlen de tus ideales y, en cambio, te respeten por lo que eres y lo que logras. Ahora bien, si lo miras desde la ansiedad, la depresión o el trastorno por déficit de atención (TDAH), puede ocurrir que empieces con entusiasmo pero no concluyas. Seguir a Jesús implica ir más allá del entusiasmo inicial: se trata de la vida misma, de los sueños futuros, de las alegrías y de las cruces de la pasión.

"Me gustaría ser viejo para ir al cielo más rápidamente" (Pier Giorgio Frassati)

La paz frente al conflicto

Busca la paz, porque pelear solo desgasta. En tiempos de Jesús, las guerras se calculaban antes de iniciarlas, procurando que fueran “ganables”. Hoy las batallas se libran con drones, inteligencia artificial e inversiones. Pero también existen guerras invisibles y profundas: orgullos, mentiras, soberbias y egos que matan al prójimo sin dejar rastro de lágrimas.

"La sociedad moderna se hunde en los dolores de las pasiones humanas y se aleja de tod ideal, de amor y paz" (Pier Giorgio Frassati)

Renunciar a los bienes

¿Cómo pedir renuncia a los bienes a quien vive solo para acumular: trabaja horas extras, sacrifica a su familia, come mal para ahorrar, no comparte e incluso roba con tal de no gastar?

El trabajo es justo y debe garantizar dignidad, pero hay valores más altos que las posesiones. La verdadera humanidad se descubre en la capacidad de compartir, en la sencillez y en la fraternidad. No se trata de promover la pobreza —eso sería lo más anticristiano—, sino de superar la obsesión por tener.

Cuando la vida se centra únicamente en poseer, se pierde el ser: no hay sal, ni luz, ni Dios. El Evangelio nos invita a pasar del “tener” al “ser”, colocando a Jesús en el centro. Así se descubre la alegría auténtica: sin coronas de esmeraldas, sin maquillaje, sin filtros, pero llena de luz y confianza.

"Vivir sin fe, sin un patrimonio que defender, sin mantener una lucha por la verdad no es vivir, sino ir tirando" (Pier Giorgio Frassati)

Conclusión

Postergar a Jesús significa relegarlo de nuestra existencia. Y cuando lo anulamos, se resquebraja el fundamento de la creación, se desdibuja la imagen de Dios y se llenan de tristeza nuestros amaneceres y atardeceres.

Palabra del Papa Francisco:

El beato Pier Giorgio Frassati, que era joven, decía que hay que vivir, no sobrevivir. Los mediocres sobreviven. Vivir con la fuerza de la vida. Hay que pedir al Padre celestial para los jóvenes de hoy el don de la sana inquietud. Pero, en casa, en sus hogares, en cada familia, cuando ven a un joven que se pasa todo el día sentado, a veces mamá y papá piensan: «Pero este está enfermo, le pasa algo», y lo llevan al médico. La vida del joven es seguir adelante, estar inquieto, la sana inquietud, la capacidad de no conformarse con una vida sin belleza, sin color. Si los jóvenes no tienen hambre de vida auténtica, me pregunto, ¿adónde irá la humanidad? ¿Adónde irá la humanidad con jóvenes tranquilos y no inquietos?

(Catequesis, 13 de junio de 2023)


Lectura del santo Evangelio según San Lucas 14, 25-33

En aquel tiempo, mucha gente acompañaba a Jesús; él se volvió y les dijo:

«Si alguno viene a mí y no pospone a su padre y a su madre, a su mujer y a sus hijos, a sus hermanos y a sus hermanas, e incluso a sí mismo, no puede ser discípulo mío.

Quien no carga con su cruz y viene en pos de mí, no puede ser discípulo mío.

Así, ¿quién de vosotros, si quiere construir una torre, no se sienta primero a calcular los gastos, a ver si tiene para terminarla?

No sea que, si echa los cimientos y no puede acabarla, se pongan a burlarse de él los que miran, diciendo:

“Este hombre empezó a construir y no pudo acabar”.

¿O qué rey, si va a dar la batalla a otro rey, no se sienta primero a deliberar si con diez mil hombres podrá salir al paso del que lo ataca con veinte mil?

Y si no, cuando el otro está todavía lejos, envía legados para pedir condiciones de paz.

Así pues, todo aquel de entre vosotros que no renuncia a todos sus bienes no puede ser discípulo mío».


Foto en: la creación (capilla Sixtina)


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Hola, soy Javier Abanto. Escribo reflexiones, vivencias y anécdotas. Publico artículos de teólogos y poetas. Estudie teología y comunicación. Desde el 2005 me dediqué a la docencia universitaria y a la gerencia de emisoras de corte cultural y religioso. La vida necesita de alegría y esperanza. Necesitamos a Dios en nuestra vida.
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¿Qué es "Luciérnaga"?

"Luciérnaga" Surge para expresarme de manera sencilla. Las luciérnagas remiten a mi origen rural - andino. Son visibles al caer la noche y hacen volar la imaginación con sus luces intermitentes, propias y naturales.

Luciérnaga se dirige a las personas de buena voluntad que buscan vivir con justicia y paz. Necesitamos del humor y la alegría. Y, sin duda, el mundo necesita de Dios.

Gracias por leer y compartir, no olvides comentar.

Javier Abanto Silva
javierabantosilva@gmail.com

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