"Lo que rebosa del corazón, lo habla la boca"

Personas de buen corazón



Tú puedes ser la persona de puro corazón. 

Porque:

Haz conocido el dolor, la angustia, el rechazo, pero no los acumulas en tu mochila, ya te despojaste.

Tu pasado te llevó a errores, horrores, desamores y engaños. Pero ya no te gustaría ser parte de esas pasiones, de forjar el sufrimiento.

Tu lucha diaria te lleva a ser mejor, a edificarte, a superar las dificultades y a amar con todo el corazón.

Incluso a amar paradójicamente, a los indiferentes, los lastimados, decepcionados, equivocados, … porque comprendiste que sólo el amor sana; sólo el amor es el gran brazo, la inspiradora palabra, el impulso de la alegría.

 Tu buen corazón te ha llevado a pedir perdón, a perdonarte, a perdonar. Ya no te das el lujo de perder personas.

Ese corazón bombea litros de sangre que muchas veces eran lágrimas, insomnios, desesperación, llanto. Sabes de morir y de resistir, de vergüenza y libertad.

Tu buen corazón, no es un romántico ingenuo, va aprendiendo a ofrecerse, a no lastimar, a ser la mano que acompaña, a ser la palabra que reconoce, a ser la voz que aviva la mirada, a ser un signo de Dios.

Sabes ya que la vida no es color rosa, hay más matices en esta acuarela de la vida. Ya sabes cómo impulsarte sin hacer daño. Cómo ser libre sin engañar. Cómo asumir tus culpas sin culpar. Amor incondicional.

Eres un corazón con coraje. No te quedas sin sangre aunque sangres. Sabes cómo seguir tu tic – tac. Te oxigena el cerebro y ya puedes experimentar la paciencia, la tolerancia, la esperanza.

Tú logras ser esa persona de buen corazón.
Tu corazón ya se traduce en otra mirada de la vida. En el amor que duele. En el amor que nunca pierde.

Literatura/ Poesía
(Autor: Laepi) (Calle 7)

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