XXVI Domingo del tiempo ordinario (B): no impidan ni dejen de hacer el bien
No se lo impidáis, porque quien hace un milagro en mi nombre no puede luego hablar mal de mí.
El que no está contra nosotros está a favor nuestro.
Apagas o avivas el fuego en tu comunidad, en tu familia. ¿Cuál es el papel que cumples? Es frecuente el riesgo de ser tentados por el espíritu de rivalidad.
La sopa de los pobres (Venecia)
XXVI Domingo del tiempo ordinario
Año litúrgico 2023 - 2024 - (Ciclo B)
"Hacer el bien sin mirar a quien"
De la pasión al amor
Juan es un discípulo con agudeza teológica, es el que expresa amor y fe, testigo privilegiado de la transfiguración, (Mc 9, 2-3), de la resurrección de la hija de Jairo (Mc 5,37), de la agonía en el huerto de Getsemaní (Mt 26, 37). Jesús les llama a Juan y a su hermano Santiago “hijos del trueno” (Mc 3,17). Es un joven con un carácter apasionado y fervoroso, por ejemplo, le pide a Jesús que haga descender fuego del cielo para destruir al pueblo samaritano que no lo recibió (Lc. 9, 45) y hoy quiere prohibir que otros tomen el nombre de Jesús.
Juan es un joven que necesita madurar. Eso también puede suceder con tu vida. El joven apasionado e impetuosos Juan va madurando a ser el discípulo del amor y fidelidad, incluso en la cruz. Su vida y sus escritos (3 cartas, el evangelio y el Apocalipsis) le convierten en un testimonio vivo y en un líder de la iglesia primitiva. ¿En qué te ha convertido la vida?
Amplitud de pensamiento e iglesia
Juan quiere delimitar o poner las condiciones de validez para hablar de Dios. Tentación: es muy conveniente que los demás cumplan nuestros criterios de pertenencia, de familia, de beneficios. La salvación no se puede monopolizar.
La enseñanza clave es: “El que no está contra nosotros está a favor nuestro”. Una actitud que se oscurece por la codicia en nuestra vida es saber reconocer que el bien, la obra de Dios, puede manifestarse más allá de nuestras fronteras, de nuestro territorio marcado.
Si cada día tuviéramos gente sanando en nombre de Jesús el mundo sería diferente. El celo eclesial, en sentido de exclusividad, es un peligro. Evitemos no aplacar las buenas acciones, la inspiración del Espíritu Santo en las personas, incluso en las otras religiones o iglesias. El bien por más pequeño que sea da alegría al corazón humano.
Un premio a las buenas acciones
Dar agua al sediento es un acto de caridad, y aún más cuando se privatiza el agua. Nuestra vida está hecha de gestos, no destaquemos los impulsados por la soberbia, sino los impulsados por la generosidad. Es una tristeza profunda cuando ves que la abundancia ha generado arrogancia y no agradecimiento, que el confort momentáneo ha sido camino a la indiferencia.
Cada palabra, gesto, acción, … va dibujando nuestra interioridad. Todos ellos están en los ojos de Dios. Por eso, muchos prefieren evitar a Dios para no sentirse analizados. El relativizmo ideológico moderno es capaz de aplaudir el mal. Pero Dios domina el mar para no ahogar a quienes tienen la piedra del molino en sus conciencias o en el colon y darles siempre la oportunidad.
Escandalosos arrojados al mar
La imagen es grave, fuerte, impactante. Normalmente pedimos un chaleco salvavidas para lanzarse al mar. Pero se habla de una piedra de molino, con un peso insuperable. Ahogarse es inminente. Sin embargo, en este valle de lágrimas hay gente que no se interesa por el bien de los demás, son abusivos, violentos, ladrones, corruptos. Simplemente no les interesa Dios y menos hacer el bien.
Por ejemplo, muchos políticos personalizan el cáncer de la corrupción, no se interesan por los niños, ni por los ancianos. Manipulan la voz y pensamiento de los más débiles, de los nuevos esclavos trabajando y rompiendo sus principios morales. Muchos de ellos cristianos, católicos confesos defendiendo ideologías y personalidades públicamente reconocidos por sus principios y ejercicios delincuenciales. ¿Cómo ser un cristiano coherente en estos ambientes?
Decisiones radicales por la libertad
La imagen del gehena o infierno es también patética: el ojo, el pie, la mano han sido ocasión de pecado, mis ambiciones, mis caminos, mis actos. El lenguaje es de quien toma decisiones radicales: más vale cortar. Pero esta radicalidad se produce cuando se identifica algo más importante para la propia vida. Cortar con el mal que da placer y poder para optar por el bien que puede incluir cero likes.
En la película “los intocables” (1987), Jim Valone es un policía veterano que era parte del sistema corrupto, pero evita involucrarse, Jim ayuda a Ness (interpretado por Kevin Costner) a darse cuenta de que la corrupción es combatida con integridad y coraje, aunque eso signifique renunciar a la comodidad y seguridad que ofrece el sistema corrupto. Ness y su equipo alcanzan una vida más auténtica, honesta y libre.
El documental Breaking Social de Fredrik Gertten muestra cómo hay puntos de inflexión que motivan a la gente a organizarse y protestar contra las injusticias y corrupción y cómo despertar las semillas de esperanza dentro de cada persona.
Finalmente, el papel que desempeñamos en esta vida corta y vulnerable necesitamos de los ojos, las manos, los pies, el corazón, el hígado y especialmente de tener a Cristo por cabeza. Sin una dirección como la de Jesús, sencillamente podemos ser discípulos apasionados, con indicios sectarios, rayando la ideología.
Palabra del papa Francisco
La gran libertad de Dios al donarse a nosotros constituye un desafío y una exhortación a modificar nuestras actitudes y nuestras relaciones. Es la invitación que nos dirige Jesús hoy. Él nos llama a no pensar según las categorías de «amigo/enemigo», «nosotros/ellos», «quien está dentro/quien está fuera», «mío/tuyo», sino para ir más allá, a abrir el corazón para poder reconocer su presencia y la acción de Dios también en ambientes insólitos e imprevisibles y en personas que forman parte de nuestro círculo. Se trata de estar atentos más a la autenticidad del bien, de lo bonito y de lo verdadero que es realizado, que no al nombre y a la procedencia de quien lo cumple. Y —como nos sugiere la parte restante del Evangelio de hoy —en vez de juzgar a los demás, debemos examinarnos a nosotros mismos, y «cortar» sin compromisos todo lo que puede escandalizar a las personas más débiles en la fe. Que la Virgen María, modelo de dócil acogida de las sorpresas de Dios, nos ayude a reconocer los signos de la presencia del Señor en medio de nosotros, descubriéndolo allá donde Él se manifieste, también en las situaciones más impensables y raras. Que nos enseñe a amar nuestra comunidad sin envidias y clausuras, siempre abiertos al amplio horizonte de la acción del Espíritu Santo.
(Angelus, 30 de septiembre de 2018)
Lectura del santo Evangelio según San Marcos 9, 38-43. 45. 47-48
En aquel tiempo, Juan dijo a Jesús:
«Maestro, hemos visto a uno que echaba demonios en tu nombre, y se lo hemos querido impedir, porque no viene con nosotros».
Jesús respondió:
«No se lo impidáis, porque quien hace un milagro en mi nombre no puede luego hablar mal de mí. El que no está contra nosotros está a favor nuestro.
Y el que os dé a beber un vaso de agua porque sois de Cristo, en verdad os digo que no se quedará sin recompensa. El que escandalice a uno de estos pequeñuelos que creen, más le valdría que le encajasen en el cuello una piedra de molino y lo echasen al mar. Si tu mano te induce a pecar, córtatela: más te vale entrar manco en la vida, que ir con las dos manos a la “gehenna”, al fuego que no se apaga.
Y, si tu pie te hace pecar, córtatelo: más te vale entrar cojo en la vida, que ser echado con los dos pies a la “gehenna.”
Y, si tu ojo te induce a pecar, sácatelo: más te vale entrar tuerto en el reino de Dios, que ser echado con los dos ojos a la “gehenna”, donde el gusano no muere y el fuego no se apaga».
Pintura
La sopa de los pobres (Venecia)
- Autor:
- Giudici, Reinaldo
- (Italia, Lenno, 1853 - Argentina, 1921)
- Origen:
- al artista por el Ministerio de Justicia e Instrucción Pública
- Fecha:
- 1884
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