V Domingo de Pascua (C): Tips para alcanzar la gloria, el mandamiento nuevo del amor.

En esto conocerán todos que sois discípulos míos: si os amáis unos a otros

 

Todo gira en torno al amor de Dios a la humanidad, desde su creación sigue la historia del amor acompañando a la humanidad, se consuma este amor o llega a su glorificación en el momento de la muerte, y se sigue quedando en el amor como mandamiento para los unos con los otros. Es decir, el único distintivo de los seguidores de Jesucristo es que saben amar.

 


La Última Cena (Juan de Juanes)


V Domingo de Pascua

Año litúrgico 2024 - 2025 - (Ciclo C)  

 

 

Un amor glorioso

¿Cuál sería tu testamento para las personas que amas el último día de tu vida? Las preguntas siempre comprometen hasta las entrañas, pero sin idealizar el amor responde: Si en la cena próxima tendrías que dar un discurso de despedida cuál sería el mensaje principal, o la idea central. Titulado, en el lenguaje contemporáneo, “2 Tips para alcanzar la gloria”   

 

Sabes que detrás de la vida existen traumas, conflictos, sorpresas, tristeza, soledad, confusión, … pero esas luchas son enfrentadas en cada momento, con criterio o sin acierto, con amor o sin la referencia de este gran motor de nuestra existencia. Entonces, en tu discurso, sazonado con una cena suculenta, no giras en torno a la tragedia, sino en la esperanza de la gloria. Este es el sentido de la vida de Jesús, el amor manifestado en la captura, en el juicio, en el camino, en la cruz. Todos estos eventos impulsados por el egoísmo humano y la injusticia no pueden ganarle protagonismo al amor que desparrama Jesús en el camino a la cruz. 

 

Un amor de los unos con los otros, no contra los otros.

Durante la última cena Jesús sólo tiene palabras de ternura: “hijitos”. A los que llamó amigos, ahora les abre su corazón para mostrarles una auténtica lucha. La misión de Jesús es clara: la salvación de los hombres. Su misión no es armar un ejército, ni una ONG, ni un colegio, ni un hospital, etc. Los ha llamado, no por ser buenos pescadores ni por saber manejar la espada, sino para pescar hombres con la red del amor, para revolucionar el mundo con la fuerza del amor, para buscar la salvación.

 

Entonces, la deducción es evidente, los discípulos seguirán a su Maestro, imitarán, serán el testimonio claro de amor y verdad. El mundo sigue necesitando del amor ante la guerra, la corrupción, el odio. Jesús va revolucionando las mentes violentas, por ejemplo, el Buen Samaritano, la mujer adúltera, el administrador astuto, entre otras historias plantean temas de solidaridad, justicia economía, frente a la inseguridad, desigualdad, machismo, etc. Todavía existen países que no quieren aceptar la predicación cristiana para seguir “normalizando” las injusticias.


Es decir, en este domingo, tu gran misión es el amor. El amor, desde cada arteria de tu corazón, tus palabras, tus acciones. El amor como referencia de buen trato con los demás. El amor como la única herencia de la persona que más amó. Si no vas bien en el amor, la vida es triste. La identidad de cada cristiano es saber amar. Puedes tener la convicción de San Pablo: “Nadie puede separarme del amor de Cristo.

 

 

Palabra del Papa Francisco

 

¿cuál es la novedad de este mandamiento que Jesús encomienda a sus discípulos? ¿Por qué lo llama “mandamiento nuevo”? El antiguo mandamiento del amor se ha convertido en nuevo porque ha sido completado con este añadido: «como yo os he amado a vosotros», «amaos los unos a los otros como yo os he amado». La novedad está completamente en el amor de Jesucristo, ese con el que Él ha dado la vida por nosotros. Se trata del amor de Dios, universal, sin condiciones y sin límites, que encuentra el ápice sobre la cruz. En ese momento de extremo abajamiento, en ese momento de abandono al Padre, el Hijo de Dios ha mostrado y donado al mundo la plenitud del amor. Repensando en la Pasión y en la agonía de Cristo, los discípulos comprendieron el significado de esas palabras suyas: «Que como yo os he amado a vosotros, así os améis también vosotros los unos a los otros». 


(Papa Francisco, Regina Caeli 19 de mayo de 2019)

 

Lectura del santo Evangelio según San Juan 13, 31-33a. 34-35

Cuando salió Judas del cenáculo, dijo Jesús:
«Ahora es glorificado el Hijo del hombre, y Dios es glorificado en él. Si Dios es glorificado en él, también Dios lo glorificará en sí mismo: pronto lo glorificará. Hijitos, me queda poco de estar con vosotros.

Os doy un mandamiento nuevo: que os améis unos a otros; como yo os he amado, amaos también unos a otros. En esto conocerán todos que sois discípulos míos: si os amáis unos a otros».


La última cena es una obra del pintor Juan de Juanes, pintada entre 1555 y 1562,[1]​ empleando la técnica de pintura al óleo sobre una tabla de 116 × 191 cm. En la obra se representa el acto de la última cena de la tradición cristiana, uno de los más repetidos de la iconografía católica.

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